XXXI

viernes, 30 de noviembre de 2018


Hace más de una semana, entré de lleno a la década de los treinta. En esta nueva época de mi vida, quiero agradecer a todas las personas que han estado cerca de mi por tantos años: gente que me ha mostrado su comprensión y que me han alentado a seguir adelante con mi vida pese a que me enfrente a monstruos temibles como la ansiedad y la depresión. 

Gracias al universo por regalarme una enorme gama de lecciones de vida y experiencias. Gracias por conspirar en los momentos más claves de mi vida. Gracias por todo. 

El año pasado, me convertí en una vil ermitaña. Pero me he comprometido salir de mi caparazón, conocer nuevas personas y soltarme de todo el drama. ¡Que así sea y así ya es!